Después de muchas intentonas, risas flojas y esa tendencia mía a subir los hombros cuando me decía que me iba a echar una foto, el dedo comenzó a disparar y de aquella sesión, de la que por cierto no me ni había peinado, ni maquillado y en pantalón corto salieron unas cuántas fotos, de las que ella hizo una selección.
Hoy y después de casi un año quiero sentarme a compartir una de esas fotos ¿Por qué?
1. Porque yo no suelo posar de ese lado porque no le considero mi lado bueno, y al tener el lunar creo que me afea bastante la cara
2. Porque se me ve de perfil, con la que yo siempre he considerado y sigo considerando mi horrenda nariz
3. Porque no miro a cámara
4. Porque salgo con un seriedad o mejor dicho tranquilidad real, que sentí apoyada en esa pared con ella al otro lado del objetivo, después de haber hecho varias respiraciones profundas, porque la vergüenza me podía
5. Porque llevo las gafas y es muy raro que yo me eché alguna foto con ellas porque me veo poco favorecida
6. Porque veo reflejada mucha parte de mi, esa mezcla entre la alegría que trato de tener pero también la tristeza, fragilidad y hasta agobio que tenía ese día del que la hice partícipe a ella como practicamente de todas las cosas importantes de mi vida.
Y como dice una canción de El Sueño de Morfeo que me encanta: "esa soy yo, asustada y decidida, una especia en extinción tan real como la vida".
Hace unos días veía un video del actor Miguel Herrán en instagram en el cuál decía que no le apetecía salir o hacerse en un foto en una ficticia felicidad, y creo que muchas veces las redes sociales son armas donde no se muestra la realidad, sino una parte guay de nosotros y nosotras, y oye ya que este es mi rincón, yo me quiero mostrar tal cuál soy:
* Con mi nariz
* Con mi lunar
* Con mi gafas
* Con ese cuello más gordito
* Con esa mirada que siempre trata de ir más allá de lo que se ve
* Con esos pelos mal peinados y sudados -porque vaya calor hacia ese día- que también forman parte de mi
* Con ese contraluz de raíces que asoman bajo el rubio
Pero ¿Queréis que os diga una cosa? Que no me importa porque creo que es una de las pocas fotos que tengo de mi en la que me siento realmente yo, sin esconderme detrás de una sonrisa falsa o una persona para tapar mis kilos de más.
Me veo con mis alegrías, pero también con mis penas; con mis sueños pero también con mis desvelos; con mis sentimientos encontrados, veo a esa Natalia con la que convivo día a día y con la que trato de encontrar el equilibrio, pero que tampoco esconda sus altos y sus bajos, porque son una parte esencial de mi vida.
Una Natalia que sigue con su niña interior muy presente, cuidándola y mimándola, pero que trata de mirar la vida de forma fuerte aunque a veces la espondilitis o la simple vida golpeé, porque sino no sería una vida, sería un sueño.
Y yo quiero vivir la vida, llorarla, amarla, disfrutarla, bailarla, reírla, cantarla y aprender de ella.
Mi amiga Irene me dice que soy una mujer fuerte y enérgica, pero personas como ella, en la que confió y quiero, me hacen que sienta la suficiente confianza como para mostrarme tal cuál soy.
Si os apetece ya me contaréis que os parece mi foto???
Me despido de vosotr@s con la canción que antes os comentaba antes, y que es muy especial, porque en muchos aspectos me siento muy identificada con ella
Muchos besos rinconer@s
:) :) :) :) :)
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