Amor puro, pasión... Elisa y Marcela

El sábado tuve la suerte, y repito, la gran suerte, de poder ver la nueva película de Isabel Coixet a través de Netflix, Elisa y Marcela

Me deje llevar por cada plano donde:

- El amor traspasa la pantalla
- La pasión te atrapa
- La dulzura te envuelve
- Las ganas de permanecer juntas las hace luchar, desde su posición de mujeres y de primeros del S.XX

La historia nos desplaza A Coruña en 1885. Marcela conoce a Elisa el primer día de colegio, empezando una estrecha amistad que termina convirtiéndose en un romance que deben mantener en secreto. Los padres de Marcela sospechan de la relación y deciden enviarla al extranjero un par de años. El tiempo pasa, pero los sentimientos entre ambos no cambian y el reencuentro con Elisa es magia.

En este momento deciden compartir su vida juntas, aunque los rumores no tardan en aparecer en el pueblo. Para evitar los cotilleos y las presiones sociales, la preja elabora para volver como Mario y casarse con Marcela. Nada será fácil para este amor prohibido.

La película cuenta la historia del primer matrimonio entre mujeres en España desde la era del Imperio Romano, que tuvo lugar el 8 de junio de 1901.

Una dulce pero dura historia donde el amor da igual si entre mujer-hombre-hombre-mujer, hombre-hombre, mujer-mujer, éste traspasa la pantalla y te hace partícipe de cómo cuando llega no se puede huir de él, y no hay ni ley divina ni de los hombre que lo pueda evitar.

LO QUE MÁS ME HA GUSTADO DE ELLA:

- 0 cursilerias
- un maravilloso blanco y negro de telón de fondo
- esos planos cortos donde los personajes ganan importancia
- una sombría pero regia ambientación
- como el mar toma tal importancia que termina siendo un protagonista más

- cuidado y delicado guión
- una cámara en la mano de Isabel Coixet que una vez más consigue hacer que una historia se respire y se acaricie

- esas miradas de complicidad, amor, pasión, dulzura, ternura...

- Natalia de Molina y Greta Fernández, están sublimes, deleitando con papeles aparentemente frágiles pero llenas de fuerza para luchar por vivir el amor como lo sienten no cómo espera de ellas la sociedad.

¿Algo qué no me haya gustado de ella?

Absolutamente nada, solo me queda recomendar su visión y disfrute porque en una época donde algunos y algunas creen que los sentimientos y emociones se deben tratar con terapias, apostemos por un film donde el amor vence sin importar géneros.

:) :) :) :) :)