Me encanta recordar esas noches de cuando era niña donde los nervios que comían, el insomnio era mi gran aliado y los botes de alegría y las sonrisas jamás faltaban, además de los innumerables viajes a casa de mi vecina Canuchi, para poder enseñarle cada cosa que me habían dejado los Reyes esa noche larga de trabajo duro para ellos.
Esos nervios y esa alegría de mayor no faltan porque me encanta ver si los Reyes me tienen preparada alguna sorpresa y por supuesto, si está me gusta, aunque os diré que soy muy fácil de regalar, porque me encanta todo lo que siempre me han regalado, libro, película, muñeco funko :P
Pero también me encanta hacer los encargos a "los mágicos" como dice mi chico y ver si mi madre y él se sorprenden y les gusta lo encargado con cariño y amor.
Así que nada rinconer@s os deseo que tengáis una buena noche de Reyes, y que éstos visiten cada casa con niño o niña.
:) :) :) :) :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario