En estos más de diez años además de volver a tenerlo en las manos, le siguieron El juego del ángel y El prisionero del cielo, todos ellos con los nexos comunes de:
- Seguir contándonos quiénes son y dónde vienen la familia Sempere.
- Transportarnos a un Cementerio que creo que todos los y las amantes de los libros hemos soñado con visitar.
- Mostrarnos una España muy negra, muy oscura, donde la ley solo para era para unos y unas privilegiadas.
- Enseñarnos Barcelona, una ciudad que particularmente amo por muchos motivos.
Hace ya unos cuantos meses, vi que Carlos Ruíz Zafón, lanzaba el que era el final de la Saga, en donde os debo ser sincera nada leí, y aunque la tenía en casa desde hace unos meses la novela me frenaba el tamaño del libro, pero nada como comenzar a trabajar y llevar un bolso con agenda, cuaderno, carpeta, estuche y demás artículos bolsiles, para decidir que era el mejor momento para volcarte de lleno en el punto y final a una de las Sagas literarias españolas que más adeptos y adeptas ha ido cosechando en esta década., con su final El laberinto de los espíritus :P
Este broche final nos lleva a la Barcelona de finales de los años 50, Daniel Sempere ya no es aquel niño que descubrió un libro que habría de cambiarle la vida entre los pasadizos del Cementerio de los Libros Olvidados. El misterio de la muerte de su madre Isabella ha abierto un abismo en su alma del que su esposa Bea y su fiel amigo Fermín intentan salvarle.
Justo cuando Daniel cree que está a un paso de resolver el enigma, una conjura mucho más profunda y oscura de la que nunca podría haber imaginado despliega su red desde las entrañas del Régimen. Es entonces cuando aparece Alicia Gris, un alma nacida de las sombras de la guerra, para conducirlos al corazón de las tinieblas y desvelar la historia decreta de la familia, aunque a un terrible precio para muchos y muchas.
Como os decía antes creo que esta novela es un homenaje de Ruíz Zafón, su autor, al mundo de los libros, el arte de narrar historias y al vínculo mágico entre la literatura y la vida.
Pero es que acaso ¿La literatura se nutre de la vida y viceversa"
Varias cosas me han encantado de esta novela:
- El personaje de Alicia Gris, desde Lisbeth Salander no encontraba un personaje femenino en la literatura que me enganchará tanto, una especie de "heroína" oscura con u corazón donde cabe el amor que trata de esconder.
- Seguir enamorándome y riéndome con la sinceridad y falta de pelos en la lengua de Fermín, sin duda uno de los PERSONAJES en mayúscula de la literatura moderna.
- El avance psicológico de los personajes en los diferentes libros, ya no solo intuimos su cambio físico, sino también social y psicológico.
- La interrelación de toda la Saga, su conexión entre los cuatro libros, como cada detalle y personaje nombrado en cualquiera, ni sobraba y hacia falta para elaborar este puzzle.
- La oscuridad y lo siniestro que se nos vuelve a mostrar del Franquismo.
- La importancia de la Verdad en nuestra vida, porque con esta conseguimos algo muy importante, ser libres.
- La injusticia o justicia mal repartida según status social que había en ese momento.
- La historia de los escritores y escritoras, sus vidas, sus familias, lo que les lleva a escribir y el qué.
- Como todo empieza y casi finaliza con un personaje llamado Julián de apellido ah!!!! (ya sabéis 0 spoilers).
- El final, lo que significa, lo que representa, lo que es, fascinada me dejo.
- El impacto abrupto de algunas partes, en las cuáles no os voy a mentir lo pase bastante mal.
Y un sin fin de cosas que han hecho de este penúltimo libro leído un regalo más que nos da ese maravilloso mundo de los libros, donde encontramos aventuras a través de los ojos.
Dice el final de la sinopsis de libro resumiéndolo un párrafo que quiero compartir y con esto pondré punto y final a este post dominguero de hoy:
" La mayoría de los mortales nunca llegamos a conocer nuestro verdadero destino; simplemente somos atropellados por él. Para cuando levantamos la cabeza y lo vemos alejarse por la carretera ya es tarde, y el resto del camino lo tenemos que hacer por la cuneta de aquello que los soñadores llaman la madurez. La esperanza no es más que la fe de que que ese momento no haya llegado todavía, de que acertemos a ver nuestro verdadero destino cuando se acerque y podamos saltar a bordo antes de que la oportunidad de ser nosotros mismos se desvanezca para siempre y nos condene a vivir de vacío, añorando lo que debió ser y nunca fue".
Que gran realidad rinconer@s. Muchas gracias y gracias por compartir este post conmigo.
Os deseo un feliz comienzo de semana, ah!!! y antes del adiós definitivo, dar las gracias a mi compañera María por animarme a leer esta novela (te quiero María), en la que lo menos importante era el peso en el hombro sino el placer que quedaba.
Hasta mañana :) :) :) :) :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario