viernes, 9 de diciembre de 2016

Todavía quedan unos días para ir a ver El Tartufo en el Fernán Gómez

Buenas tardes de nuevo rinconer@s, si hace solo un rato os estaba comentando mi plan perfecto para este fin de semana, con una visita al Museo Thyssen de Madrid. Pero ayer debido a unas migrañas y un nuevo pequeño brote de la espondilitis me fue imposible subir este post porque además quedan muy pocos días en cartel para ella, pero empecemos por el principio...

Hace unos días cotilleando la cartelera de teatro hubo un cartel que antes de ver la obra que era, me llamo poderosamente la atención.


Muchas las veces las cosas nos entran por lo ojos y esta obra de El Tartufo, tienen un cartel tan potente y con Ruben Ochandiano tan al natural que era imposible no posar mis ojos en él. Todavía tenemos hasta el 11 de diciembre para poder ir Al Teatro Fernán Gómez de Madrid que si no habéis estado nunca os diré que su comodidad es algo muy a tener en cuenta, además de estar en casi casi pleno centro de Madrid, la plaza de Colón.


Para esta obra de Moliére se han hecho numerosas adaptaciones a lo largo de la historia del teatro, siendo el de Adolfo Marsillach en el años 1969, con alusiones críticas al Opus Dei, lo que hizo de la obra causará un "mayor escándalo".

El Tartufo es una figura hipócrita que está delineada con tal perfección que se ha convertido en un arquetipo literario, que despierta frecuentes resquemores, entre quienes en distintas épocas y lugares, se han dado por aludidos.

En palabras del autor: "ha abordado esta obra y su personaje, desde la perspectiva religiosa, dada la condición de falso devoto. Pero más que su hipocresía, le ha interesado su doblez económico y social. Se trata de un perfecto narcisista que destruye a sus víctimas desde la especulación y la corrupción".

Si bien Moliére se vio obligado a un final más moralista tras sufrir prohibiciones y censuras, nuestra versión apuesta por un desenlace más creíble y tan dura como la vida misma.


Yo si pudiera os prometo que no me perdería a Don Ochandiano en este papel tan complejo a la par de narcisista y exhibicionista.

Muchos besos rinconer@s y ahora sí que sí hasta mañana :) :) :) :) :)

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