Hace casi un año comencé a llevar una vida más sana de la que estaba acostumbrada, pues la comida basura y el poco cuidarme se habían vuelto una constante y decidí hacer ese cambio no por estética sino por salud, porque como muchos sabréis padezco espondilitis anquilosante, una enfermedad reumatológica, que hace que mis días sean a veces bastante dolorosos, por eso contra menos peso tenga mejor se encuentra mi espalda, mi cuerpo y mi ánimo.
Y sí mi ánimo, porque hay muchas veces que los dolores marcan día a día, pero si os soy del todo sincera no como antes, porque siempre intento ver el lado positivo de las cosas. Y si la vida me ha puesto esta piedra en el camino digo yo que será que la salté ¿No?
Bueno pues hará casi un año mi primera gran decisión fue dejar de fumar, una cosa que yo veía imposible, pues la que está escribiéndoos en ese momento estaba llegando a fumar paquete o paquete y pico diario, y eso era algo que no podía seguir así, porque además de las jaquecas horribles que me provocaba eran un completo espanto, debido a mi enfermedad me pinchó un tratamiento un poco agresivo que provoca que mis defensas bajen a unos niveles un poco bajos, entonces ganas tenía yo de provocarme algo peor que lo que ya tengo....
Y la verdad en este año que hago el día 2 de julio sin fumar, solo he tenido tres resbalones, pues me habré fumado 6 cigarros en un año, y eso teniendo en cuenta que me fumaba 20 o más diarios, no esta nada mal ¿Verdad?
Así que a todos los que estáis en esa labor de dejar ese maldito vicio, solo so deseo fuerza y ánimo, porque es difícil pero los resultados son increíbles, vamos que estoy recuperando el color natural de los dientes, no que ya estaban empezado a amarillearse en demasía.
La segunda decisión, más por obligación que por devoción fue operarme de las anginas, y es que llevaban años molestándome mucho y por culpa del tratamiento estaban todo el día mal... así que nunca es tarde si la dicha es dejar de estar mala malísima...
Y gracias a esa operación me quite mis primeros cuatro kilos, y me vi tan guapa y mejor de salud, que decidí hacer un cambio de alimentación, no radical, pero si paulatino, lo primero fue dejar de beber Coca Cola de forma compulsiva porque la cantidad de azúcares que lleva eso....parecía que estaba embarazada y no de un bebe.
Y así una sucesión de cosas que ha hecho que en un año haya perdido casi 19 kilos, aunque la verdad ultimamente me he estancado un poco o inclusive os diría que he cogido un par de kilos, os digo que no me agobia porque sigo con mi rutina y con mis ganas de estar sana.
1º Quitamos las cáscaras de la piña.
2º Esas cáscaras las ponemos a cocer en una olla alrededor de unos 15 minutos cuando el agua este hervida.
3º Una vez hervida el agua sacamos las cáscaras y las tiramos a la basura.
4º Ese agua del agua hervida con las cáscaras, las colamos en una botella de agua para quitarle los restos de las cáscaras.
5º Ese agua la metemos en la nevera, y siempre que queramos beber agua, bebemos de esa botella.
Este truco es una maravilla, porque además de que estamos bebiendo una bebida muy sana, ese agua nos hace ir al baño a hacer pis y mediante esa orina eliminamos grasas del cuerpo.
Yo os admito que lo hago una vez cada dos semanas, quizás lo debería hacer más, y os prometo que es una maravilla, porque se nota.
Además que de sabor está muy buena, si veis que no so convence el sabor, os recomiendo añadirle un poco de sacarina para que sepa un poco más dulce, pero sin nada está muy bueno.
¿A qué es fácil?
Bueno y como siempre dicen algo de deporte no viene nada mal, yo lo hago todos los días y otro de mis descubrimientos, ha sido salir a andar, he descubierto que es un placer y que cada día me es más adictivo... vamos que mi próximo reto es correr :P
Bueno rinconer@s deseo que hayáis disfrutado del fin de semana tanto como yo, así que hasta mañana, y ya sabéis men sana incorpore sano... y eso mi mente y mi cuerpo lo están notando mucho... y mi espalda no os digo :)
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