El río Aven en Bois d'Amour de Paul Sérusier.

Hola rinconeros, para este casi último día de la semana laboral he querido dejar uno de mis espacios favoritos, que es el relacionado con el mundo de la pintura, el arte... ese increíble mundo en que cada ojo ve lo que quiere y cada uno interpreta lo que quiere y eso creo que no tiene comparación con nada.

Enfrentarse a ver un cuadro que es una de las sensaciones más bonitas a las que se puede enfrentar los cinco sentidos que tenemos los seres humanos, porque el hecho de que ese cuadro que vemos no nos gusté eso implica un sentimiento, y creo que por eso en gran medida se mueve nuestro mundo, por los sentimientos.

La elección de hoy, creo que es sorprendente y fascinante por la paleta de colores y por lo que yo interpreto desde mi subjetividad de él, es El río Aven en Bois d'Amour de Paul Sérusier, que gama de colores más increíble.

Que simple y que hermoso es a la vista ¿No creéis? Aparentemente vemos el azul del curso del río, el puente naranja del fondo, los colores verdes y amarillos que nos muestran el color de las hojas de los frondosos árboles.... pero si os soy sincera la primera vez que lo vi, pensé "cuánto color junto, que preciosidad", hasta luego detenidamente y buscándolo en el ordenador pude observar cada detalle de este enigmático cuadro.

Por una parte me parece muy hermosa la manera de mezclar los colores, porque bajo mi opinión no sigue ninguna norma establecida sino que el lo pinta como quiere , como sueña que sería o quizás como su ojo lo ve....

También debería deciros que Paul Sérusier pertenecía al mundo del simbolismo, en el que la unidad estilística con una actitud mental y espiritual que permitía muchas variante; el color y la forma se usaban para traducir pensamientos y sensaciones en términos visuales... y que mejor sensación que sentarte en el banco de un parque a ver el curso de un tranquilo río, con su paisaje, con sus árboles, con tranquilidad sin agobios....

Una de las frases que guiaba a los simbolistas era "Hay que recordar que un cuadro, antes de ser un caballo de guerra, una mujer desnuda o alguna que otra anécdota, es en primer lugar y ante todo una superficie plana cubierta de colores en cierto orden"... a lo que yo añado y una vez establecido ese orden cada uno vemos lo que queremos, aunque en este cuadro en particular se percibe claramente la tranquilidad y la belleza de esa parte del río que Sérusier nos quería mostrar, o yo por lo menos lo veo así.

Así que espero que os gusté o por lo menos os provoque algo el ver este precioso cuadro, porque esas sensaciones, sentimientos o llámalos X son increíbles e indescriptibles.

Bueno rinconeros mañana viernes nos veremos con los estrenos de la cartelera... un beso y hasta mañana :)