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jueves, 15 de enero de 2015

Poco a poco, paso a paso, día a día, encontrándome mejor

Hola a tod@s rinconer@s!!!! no os podéis imaginar las ganas que tenía de sentarme en mi ordenador y ponerme a teclear, escuchar ese bendito ruido de los dedos golpeando el teclado, el tacto de las teclas en las yemas de los dedos... vamos que después de unos días que han sido horribles para mi, me suenan a música celestial para mis oídos, vamos como Para Elisa de Beethoven que es una de mis sinfonías favoritas.


Hace ocho días, el 7 de enero para ser más exacta empecé a ponerme enferma con unas diarreas, unas fiebres y unos vómitos terribles. Y yo que siempre voy de fuerte y que me fié del 061 (para mi desgracia) no acudí al hospital, hasta que el sábado ya no me tenía ni en pie y gracias a la doctora y al celador de las Urgencias del Centro de García Noblejas me mandaron al Hospital Ramón y Cajal de urgencia porque estaba de todo menos buena.

Solo os diré que el diagnóstico ha sido gastroenteritis severa aguda, vamos deciros que he perdido casi nueve kilos en 8 días, ha sido un horror porque en urgencias nos dieron un susto diciéndonos que podía tener una bacteria pero todo quedo en un susto, en un virus bastante virulento que debido a mi enfermedad y el tratamiento que sigo se ha complicado bastante.

Pero yo que soy burra y cabezona por naturaleza y que hoy me he levantado algo mejor quería sentarme aquí con vosotr@s para poder compartir con vosotr@s algunas experiencias agradables y desagradables que he vivido estos días.


Lo primero de todo es que tenemos una Sanidad Pública y unos profesionales trabajando en ella que creo que son una de las mayores joyas que hay en nuestro país, porque la medicina es algo vocacional, ahí no te metes para hacerte rico lo haces porque piensas y te gusta ayudar a los demás. Y que mejor ayuda que curar a un enfermo.

Lo segundo es que las personas que me han atendido en el 061, número de urgencias médicas del Ayuntamiento de Madrid además de haber sido unos desagradables poco más y me buscan un problema.



Y os cuento hay una obsesión en mi y es que no me gusta molestar, no me gusta ir al médico o al hospital por ir, porque siempre hay cosas más importantes que las mías y así llamé en repetidas ocasiones y además de ser bastante groseros (yo lo asocio a la cantidad y volumen de trabajo ya  los pocos sanitarios contratados para este servicio), tuve que esperar un día más de 40 minutos y todas las respuestas fueron las mismas sabiendo mi enfermedad de base: "hay un virus, paciencia y líquidos"... pero claro cuando has ido al baño más de 40 veces y lo dices a la persona que te atiende y te dice que eso es normal....

Después que desde el urgencias de mi barrio me mandaran al Hospital Ramón y Cajal y que vieran que de normal nada y me tuvieran hospitalizada unas 26 horas....






Allí hay personal tan bueno, tan eficaz y que por desgracia los recortes les hacen quedar tan mal porque parecen que son ineficaces cuando la realidad es que no tienen todos los recursos que debieran, solo deciros que la manta que me pusieron tenían más agujeros que un queso de grouller... y conseguir una almohada fue más un acto de fe que un hecho!!! Desde aquí gracias a las auxiliares por como me trataron porque si además de que te encuentras mal tienes a seres agradables contigo todo es mucho más fácil.

Claro otro mundo aparte es cogerme las venas ¿De verdad el Hospital Ramón y Cajal no tiene ninguna enfermera o enfermero que me sepa coger las venas sin destrozarme los brazos, manos, antebrazos, dedos, etc?

Yo puedo entender que tengo unas venas complicadas pero la carnicería que sufro siempre que entró en ese Hospital me parece muy innecesario y gratuito, porque encima tengo que soportar comentarios tales como "histérica" "nerviosa" "es que tienes la piel muy dura" "la sangre muy densa".... Solo os diré que las enfermeras pediátricas me pillan las venas a la primera ¿Entonces es necesario hacerme pasar por ese trago?

De todas maneras mostrar mi enfado y comentaros mi futura reclamación a una determinada enfermera que me atendió el domingo por la mañana, porque además de tratarme de forma muy maleducada, grosera y desagradable, su trabajo en mis venas fue más que censurable, vamos que me quito la vía a cuajo.... en fin gracias y la reclamación nada más me recuperé se la iré a poner, porque estoy harta de luego tirarme semanas recuperándome de pinchazos horribles.

En fin solo poder deciros rinconer@s como despedida que gracias por las visitas de estos días y sobretodo a la mínima que veáis que algo en vuestro cuerpo no va lo normal que debiera, acudir a urgencias porque muchas veces por retrasar o pensar "me pondré mejor" te puedes buscar algo mucho peor.

Gracias a mi chico y a mi mami por estar haciéndome estas semanas más fáciles, os quiero.

Hasta mañana rinconer@s :) :) :) :) :)


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