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lunes, 1 de diciembre de 2014

La cruel historia que hay detrás de Libre

Tiene casi 20 años y ya está
cansado de soñar,
pero tras la frontera está su hogar,
su mundo, su ciudad.
Piensa que la alambrada solo es
un trozo de metal
algo que nunca puede detener
sus ansías de volar.

Libre...
...como el sol cuando amanece,
yo soy libre como el mar.
Libre...
...como el ave que escapó de su prisión
y puede, al fin, volar...
Libre...
... como el viento que recoge mi lamento 
y mi pesar
camino sin cesar
detrás de la verdad
y sabré lo que es al fin, la libertad.

Con su amor por montera se marchó 
cantando una canción
marchaba tan feliz que escuchó
la voz que le llamó,
y tendido en el suelo se quedó
sonriendo y sin hablar
sobre su pecho flores carmesí
brotaban sin cesar.

Libre...
...como el sol cuando amanece,
yo soy libre como el mar.
Libre...
...como el ave que escapó de su prisión
y puede, al fin, volar...
Libre...
... como el viento que recoge mi lamento 
y mi pesar
camino sin cesar
detrás de la verdad
y sabré lo que es al fin, la libertad.


Y es que tras el reciente 25º aniversario de la caída del muro de Berlín descubrí que la preciosa letra de la canción Libre del valenciano Nino Bravo, iba dedicada y en homenaje a uno de los muchos que intentaron saltar las vallas que separaban las dos Alemanias que era el fiel reflejo de la vergüenza humana.

La canción en especial habla del primer alemán que murió intentando atravesar el muro, Peter Fechter, un obrero de la construcción de 18 años, que intentó huir junto con un amigo y compañero de trabajo, aproximadamente de un año después de la construcción de éste.


Hasta llegar al muro las cosas salieron bien, pero cuando se encontraban arriba, los soldados les dieron el alto, y a continuación dispararon. Su compañero tuvo suerte, pero Peter resultó alcanzado por varios disparos y cayó hacia atrás, y quedo tendido en el suelo en la "tierra de nadie", durante 50 minutos, moribundo, desangrándose, a la vista de todos, y sin que nadie hiciera nada.

Durante casi una hora, los ciudadanos de ambos lados de Berlín contemplaron impotentes  su agonía, gritando a los soldados de ambos lados que le ayudasen.


No le ayudaron quizás para que sirviera de ejemplo para cualquier otro que pensase huir.

Vamos que seguro que much@s de vosotr@s sabíais esta historia pero yo que la desconocía me entristeció mucho porque el ser humano es capaz de cualquier cosa cuando está en juego su libertad, su trabajo, su pan, aunque este en juego la propia vida.


Y que bonito que Nino Bravo pusiera letra y voz a esta historia tan triste que no nos debe ser tan lejana, porque ¿En qué situación se encuentran los inmigrantes que quieren saltar la valla de Melilla? Porque hay imágenes tan aberrantes y feas como la historia de Peter.

Solo me puedo despedir de vosotr@s con esa preciosa y ahora se triste historia de Peter Fechter, hasta mañana rinconer@s :) :) :) :) :)




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