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martes, 22 de enero de 2013

El abuelo que saltó por la ventana y se largó

Yo creo que a cualquier persona que lea este título como mínimo además de echarse unas risas, le llama la atención de que irá la historia de este abuelo, que por cierto la portada sale disfrazado de cerdito.....







Momentos antes de que empiece la pomposa celebración del centésimo cumpleaños, de Allan Karlsson decide que nada de eso va con él. Vestido con su mejor traje y unas pantuflas, se encarama a una ventana y se fuga de la residencia de ancianos en l que vive, dejando plantados al alcalde y a la prensa local. Sin saber a dónde ir, se encamina a la estación de autobuses, el único sitio donde es posible pasar desapercibido. Allí, mientras espera la llegad del primer autobús, un joven le pide que vigile su maleta, con la mala fortuna de que el autobús llega antes de que el joven regrese y Allan, sin pensarlo dos veces, se sube con la maleta, ignorante de que en el interior de ésta se apilan, !santo cielo!, millones de coronas de dudosa procedencia.

Pero Allan Karlsson no es un abuelo fácil de aminalar. A lo largo de su centenaria vida ha tenido un montón de experiencias de lo más singulares: desde inverosímiles encuentros con personajes como Franco, Stalin o Churchill, hasta amistades comprometedoras como la esposa de Mao, pasando por actividades de alto riesgo como ser agente de la CIA o ayudar a Oppenheimer a crear la bomba atómica. Sin embargo, esta vez, en su enésima aventura, cuando creía que son su jubilación había llegado la tranquilidad, está a punto de poner todo el país patas arriba.

Mi opinión sobre este libro es muy positiva, porque además de pegarme una pechada a reír inmensa, ha habido momentos en los que me ha aburrido un poco; pero si pusiéramos una balanza las cosas buenas vencen a las malas.

Me parece increíble la vida de este señor, desconozco si ha existido en la vida real o no, lo que si que ha llevado la vida que ha querido, cómo ha querido y en la medida de sus posibilidades siempre ha sido feliz. Un señor alejado de las ideologías y la política porque lo único que le importaba era vivir él y como vulgarmente se dice "salvarse su culo" con dinamita o con embustes, lo primero es vivir bien y haber estado en el momento adecuado en el sitio adecuado, y eso, le ha ayudado a lo largo de sus 100 años.

Una recomendación para pasar una lectura divertida y sorprenderte, porque en ningún momento cuando empiezas a leer este centenaria historia, crees lo que va a pasar, la sucesión de hechos que van a suceder, la cantidad de personajes que van a pasar por sus 392 páginas, con elefante incluido y sociedad criminal cristianizada, en definitiva un buen libro para que pase por vuestras manos.

Ya he comenzado uno nuevo, un libro que nunca imaginé leer, pero que debo admitiros que lo poco que llevo me está dejando con la boca abierta y el corazón encogido, pero el título lo dejo para cuándo escriba sobre él... jajajaja.

Besos rinconeros, mañana aquí en el mismo sitio pero no se seguro sí a la misma hora... hoy me quiero despedir con una frase que me han dicho esta mañana y que me ha parecido preciosa: "hay cuerpos que huelen muy bien" y mi conclusión a esta es, que hay veces que pasamos por alto muchas cosas o detalles de la vida, y un chico de 24 años con una particularidad muy especial, me ha hecho que el corazón no parará de sonreirme.

Hasta mañana.

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